11 de agosto de 2009


Sí, al fin lo decidí, me decidí, lo habia estado pensando detenidamente. Los pros y los contras, contras.. media Francia me querría ver muerta después de esto, pros.. le quiero, le quiero con todas mis fuerzas, él me daba vida, fuerzas para seguir y sonreir.. si él se iba y si fuera como dijo como si nunca hubiera existido.. la verdad es que estaría muerta en vida, sin salvación alguna. 

Me preparé una ligera maleta sin pensar en qué deberia llevar y qué no, al fin y al cabo, iva a empezar una vida nueva..
Salí de la habitación y de la casa con sumo cuidado, sin hacer el mínimo ruido ya que al ser domingo los sirvientes dormían hasta tarde, pero mi esposo, como de costumbre habría madrugado para ir a pescar.. 
Cojí un taxi que me llevó hasta la estación, una vez allí. Sentí miedo, mucho miedo.. Eran las 9 y cinco minutos. 
Miles de preguntas recorrieron mi mente.. Y si había cojido el tren sin esperarme? y si de verdad no creía que fuera a acudir? y si se quedó, de verdad me quiere? 
Estaba más nerviosa que un flan cuando cruzé la puerta.. y no había nadie, absolutamente nadie, aquella enorme estación estaba vacia.. entonces me vinieron sus palabras a la cabeza, como si nunca hubiera existido, y un escalofrío recorrío todo mi cuerpo.. 
 

Pero de repente ví salir a alguien por la puerta de los servicios.. alto, rubio, vestido informal, miraba el reloj insistentemente.. me acerqué prudentemente, era él. Todavía no me había visto.. en cuanto giró la cabeza sus ojos verdes chispearon de felicidad.. dejé la maleta en el suelo y le besé como nunca antes había besado a nadie, como si no hubiera mañana.. Entonces él me abrazo con una fuerza descomunal y le susurré al oido.. je t'aime mon amour, je t'aime .. 

1 comentario:

  1. que bonitoooo, esto lo escribes tu?? :O
    si es asi me encanta, me encanta

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